Porque toda mujer embarazada necesita apoyo emocional...
Alguna vez os han contado cómo vivían el embarazo las mujeres hace unos 100 años o más? ... las mujeres se sentían acompañadas por la sabiduría de aquellas otras que tenían ya experiencia en partos, lactancia, crianza...en definitiva, los conocimientos y costumbres se transmitían de mujeres sabias de madres a hijas...en la misma familia, en el mismo pueblo. Cuando una mujer quedaba embarazada se encontraba rodeada de una tribu de mujeres expertas, de mujeres con mucho conocimiento sobre el tema que le apoyaba y le resolvía aquellas dudas que ésta podría tener, lo que le hacía sentir segura, capaz, acompañada...
Actualmente, vivimos en sociedades aisladas...con familias nucleares que en su mayoría han emigrado de su pueblo, de su país, incluso de sus costumbres. Normalmente nos encontramos con familias que viven en grandes ciudades, en pisos pequeños, con poca familia y amigos a su alrededor, y sobre todo, en una sociedad que ha perdido el valor y la importancia que tienen traer un bebe al mundo y criarlo...una sociedad que se ha "masculinizado".
Más allá de hablar de lo valorado que está o no el papel de una madre en esta sociedad, hablemos de esa mujer que está gestando. Una mujer embarazada actual se encuentra sin ese apoyo de mujeres sabias del tema que existían antes. De hecho, se encuentra rodeada de consejos "bienintencionados" de "expertos" de la nueva moda de crianza veloz (así la llamo yo), que en su gran mayoría son hombres. No es que quiera ser feminista, ni machista. Pero el instinto sabio y natural que la mujer ha desarrollado por propia supervivencia de la especie a través de los siglos y por experiencia propia, se ha ido perdiendo, ...puesto que con la incorporación de la mujer al mundo laboral, ya no se habla de partos y mucho menos de lactancia....cuanto antes recupere la mujer su vida pasada antes de tener hijos y se incorpore al sistema económico mucho mejor. Vivimos en una era consumista, veloz, materialista, donde lo económico prima sobre lo sentimental.
Pero, si buscamos dentro del corazón de aquella mujer fuerte que trae una vida al mundo, encontraremos un mar revuelto. Dudas, miedos, alegrías, sentimientos a flor de piel, racionalidades, pensamientos ambiguos....que difícil es tener hijos en ésta época!!!...llega a ser incluso algo "antinatural" muchas veces. Se rechaza todo aquello que es profundo, aquello que remueve hasta las entrañas... nadie quiere hablar de esas cosas, nadie quiere abrirse como un libro y ser escuchado, puesto que nadie está dispuesto, o nadie se atreve.
Es por ello que ha surgido un nuevo rol, un nuevo papel: las Doulas.
Según la página oficial www.doulas.es : Las Doulas son mujeres, en su mayoría madres, que acompañan a otras mujeres durante en el camino a la maternidad. Su labor fundamental es dar soporte, tanto físico como emocional, durante el parto y el puerperio.Las doulas no tienen una preparación académica específica pues no existen una "carrera de doula". SU formación abarca conocimientos sobre fisiología del embarazo, parto y puerperio, de puericultura, lactancia, educación prenatal...
En mi propia experiencia, puedo decir que tener una doula en tu embarazo, y postparto es algo totalmente necesario. Una doula es un apoyo indispensable que te ayuda a CONFIAR. Confiar en tu cuerpo, n tu capacidad de gestar, de parir, de lactar, de criar. Son muchas ventajas lo que conlleva tener una mujer sabia en el tema, que te acompañe, que te oriente, que te guíe y sobre todo que no te juzgue, puesto que una doula no te dice que debes hacer, sino que te acompaña a encontrar el camino que estás buscando, aquel que tu deseas recorrer...todos aquellos miedos y dudas quedan resueltos y te das cuenta que no era tan difícil como te lo suelen pintar.
Particularmente desde aquí, Ana, te agradezco todo el apoyo que encontré con tu compañía y orientación tanto para mí, mi marido y todos los que me rodeaban en ese momento tan crucial como fue tener a mi segunda bebe. Si no hubiese sido por mi doula, creo que no me hubiese visto capaz de tener a mi bebe sin la famosa y "milagrosa" epidural (ya hablaré de ésta más adelante), no hubiese podido curar las heridas de un primer parto traumático...ella me ayudó a entender que SI se puede parir, que toda mujer está capacitada, que SI puedes criar a tu bebe, y que no hay nadie mejor que tu misma para hacerlo, que solo hay que dejarse llevar por ese instinto perdido...
Ella estuvo allí, pendiente, en presencia, al teléfono, siempre que la necesité.... y nos acompañó en un parto y postparto con conocimiento, ayudando a apaciguar las aguas, a entender, a sentir.....cuando tuve miedo me calmó y cuando dudé... me decía: "confía, tu puedes, sólo tú sabes lo que tienes que hacer".
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